Podría decir que son como el agua y el aceite, lo que no tiene uno lo tiene el otro, por eso creo que se complementan tan bien entre ellos. Mari José es atrevida, arriesgada y muy viva, un terremoto el cual no para un segundo, sencilla y directa, una mujer de armas tomar pero con un corazón enorme. German es tímido, bastante más tranquilo que ella pero cuando lo conoces es un trozo de pan, tiene un poder de decisión que hasta a mí en ocasiones me gustaría tener. Aficionado a la fotografía, quien valora el trabajo que lleva este mundo y una vez más me pedí más a mismo para que todo saliese bien…

Aquel día Mari José estaba más nerviosa de lo normal, las prisas le arrebataron ese momento de tranquilidad, aun así conseguimos fotos estupendas de ellas y toda su familia. German mantuvo la calma y al lado de su familia inmortalicemos aquel momento tan íntimo.

Escogieron una iglesia al lado del mar. Una Ermita en Isla Plana llena de luz y de vida, acompañada de un sol radiante y un día que sería inolvidable. Familia e invitados emocionados por la magia que se respiraba en el ambiente, los novios estaban en su propio mundo y disfrutaron de ese momento para darse el SI QUIERO. Creo que ellos y todos los que estamos presentes recordaran el momento en el que el águila le trajo a las manos los anillos, algo simbólico pero que nos dejó a todos con la boca abierta, un momento precioso del que quise que recordaran siempre.

Antes de entrar a la celebración encontremos un rincón donde la tranquilidad reinaba y por un momento disfrutaron de ellos. Durante toda la noche busqué momentos únicos, que al mirar las fotos te trasmitan algo, cualquier tipo de sentimiento, pero quiero que en cada una de ellas encuentren un recuerdo más que una pose. Porque  la vida son momentos y esos momentos son los recuerdos que tendremos en un futuro y con ellos lo conseguí. Después de un día largo y una noche aun sin acabar llegue a mi casa y quise ver el trabajo de aquel día,  y la verdad que el resultado fue perfecto. Es más, esa foto que ME ENCANTA donde ellos están bailando en medio de la pista y la luz es más tenue, me recordó un momento de la película a 3 metros sobre el cielo.